Educación, Formación y Rehabilitacion
RESUMEN:
Hace unos años los niños con síndrome de Down no accedían a los sacramentos de la iniciación cristiana porque no habían alcanzado los requisitos mínimos que señala la Iglesia para recibirlos. En la actualidad, gracias a buenos programas y a mejor atención educativa, la mayoría de los niños reciben la Primera Comunión. Sin embargo sus aprendizajes son mínimos y la mayoría no han continuado la catequesis. Como consecuencia van creciendo con gran desconocimiento y muy poca o ninguna vida de piedad. Si en el resto de sus vidas hay programas y actividades que les ayudan a progresar y madurar de un modo impensable hace unos años ¿cómo no se pone el mismo interés para que maduren y progresen en su vida interior, sobrenatural, cristiana? Presentamos el inicio de un programa de formación cuyos objetivos son que conozcan más y mejor el contenido esencial de la fe cristiana, de modo que ellos también puedan aplicarla a su propia vida personal: para ser mejores, para ayudar a los demás, para ser más felices
Fuente original - http://www.downcantabria.com/revista113.htm
Revista síndrome de Down, Volumen 29 (2). Número 113. Junio 2012